Levítico 21,6
Tratado del sacerdocio n.5: Y si el sacerdote quiere saber qué caudal de virtud ha menester para cumplir bien las obligaciones de dignidad tan alta y tan santa, oiga a la santa Iglesia, que en el ofertorio de la misa [del Santísimo Sacramento] dice ansí: : Sacerdotes Domini incensum et panes offerunt Deo; et ideo sancti erunt Deo suo.
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n. 6: Aquel incienso y aquellos panes significaban el oficio sacerdotal de la nueva Ley, que consiste en ofrecer al Señor incienso de agradable y eficaz oración que amanse su ira y consagrar y ofrecer el pan que del cielo vino, que es Jesucristo nuestro Señor, que tanto excede a los panes y sacrificio de la vieja Ley como el cielo a la tierra, y mucho más.
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n.12: Si para tratar el cuerpo purísimo de Cristo nuestro Señor no se requiere santidad, no sé para qué sea menester en la tierra, pues esta es la más santa [cosa] de todas.